Del monográfico de David Bueno y Ana Forés que lleva por título "5 principios de la neuroeducaciónque la familia debería saber y poner en práctica", extraemos los siguientes principios que resumimos de este modo:
1.SOMOS ÚNICOS E IRREPETIBLES.
Nuestro cerebro no es solo irrepetible si lo comparamos con otros cerebros, sino incluso si lo hacemos consigo mismo, puesto que cada día termina siendo ligeramente diferente a cómo era el día anterior. Cualquier experiencia y todo proceso educativo influyen o pueden inlfuir de manera ligeramente distinta en cada persona. Cada hijo es único, diferente y singular.
2. INFLUENCIAR NO SIGNIFICA DETERMINAR.
La influencia de los progenitores sobre la construcción del cerebro de sus descendientes empieza antes de concebirlos. Según las variantes que hayamos pasado a nuestros hijos, su cerebro tendrá, de origen, unas características determinadas que influirán en todos sus aspectos mentales, como por ejemplo en su sociabilidad, inteligencia, creatividad, oído musical, capacidad artística, control muscular, etcétera.
Sin embargo, los genes, y las modificaciones epigenéticas, son importantes para la construcción del cerebro, pero no son determinantes.
3. ANTES DE NACER PREPARAMOS EL CEREBRO.
La primera actividad neural, las primeras señales fehacientes de que las neuronas se están comunicando entre ellas de forma regular, se produce durante la semana 25 de gestación (aproximadamente a los cinco meses y medio), y ya no se va a detener jamás.
En todo este período, y hasta el nacimiento, el estilo de vida de la madre, e incluso la atención y las muestras de afecto que le dedique su pareja, contribuirán a la formación del cerebro de su hijo.
4. DESPUÉS DE NACER, MÁS Y MÁS CONEXIONES.
Nacemos con aproximadamente la mitad de neuronas que tendrá el cerebro adulto, por lo que inicialmente se deben formar muchas neuronas nuevas. Sin embargo, sobre los tres a cuatro años de edad, el cerebro ya contiene prácticamente
todas las neuronas que precisa.
El secreto de la vida mental y de las capacidades psíquicas se encuentra los patrones de conexiones neurales y en las redes neurales que se van creando y conforman el cerebro.
5. VENTANAS DE OPORTUNIDAD: LAS 3 GRANDES ETAPAS.
0-3: Etapa esencial para imprimir el carácter y el temperamento. Muy importante ofrecer feedback a lo que van viviendo.
4-11: Es la etapa más significativa para las tareas instrumentales y académicas. Nuestro papel de padres no es hacerles los deberes, sino valorar su esfuerzo y reconocer su trabajo.
Adolescencia: El cerebro adolescente busca situarse en el mundo. Como padres debemos ofrecerles elementos de reflexión y encontrar los espacios para hacerlos.
Conocer estos principios nos ofrece las gran oportunidad de crear y aplicar recursos poderosos para fomentar un desarrollo equilibrado y saludable en nuestros hijos. Tenerlos en cuenta a la hora de decidir el estilo educativo que vamos a utilizar como padres y madres, nos empodera y capacita para hacer nuestra labor mucho más efectiva y eficaz.
No fuimos instruidos en la tarea de ser padres, pero ello no nos exime de nuestra responsabilidad de hacerlo ahora. Nuestro rol va mucho más allá de la creación de climas familiares positivos y de fomentar el buen ambiente en el hogar, porque todo lo que hacemos por y para el correcto desarrollo de nuestros hijos, afecta de manera directa el futuro del mundo y su sociedad.
Gracias por ser parte de esta familia de seres humanos conscientes que construye un mundo más sostenible e inteligente a todos los niveles.
Gracias por estar aquí.
Abrazo, amor y paz.
Descarga aquí el artículo completo de David Bueno y Ana Forés.