top of page
Buscar

Gestión del uso del móvil de tus hijos

La gran preocupación actual de los padres y madres de niños y adolescentes: EL ABUSO DEL TIEMPO EN LA PANTALLA.


Soy Blanca Sisó y hoy os traigo un post dedicado a una herramienta muy potente para ayudar a nuestros hijos con la gestión de las pantallas, educándoles en la responsabilidad y ofreciéndoles la seguridad que tanto deseamos.

Uno de los mayores miedos de los padres con hijos adolescentes (o en la previa) es el riesgo que corren frente a las pantallas. Ya no sólo por el abuso que se realiza a menudo y que puede desencadenar en una adicción a los juegos o a los chats, sino por todas aquellos peligros que pueden encontrarse en la red.

En primer lugar, somos conscientes de que todo el tiempo que pasan en la pantalla no lo dedican a otras cosas más importantes, y a menudo dejan de hacer aquello que sí deben de hacer y que es necesario para su desarrollo integral.


La gestión de este tiempo se convierte en un problema que a menudo desencadena

discusiones constantes, sobretodo cuando no hay un acuerdo mutuo del tiempo que se puede dedicar a la pantalla. A esto se le suma que, por el contexto social y el cambio tecnológico, el online se está convirtiendo en allgo prioritario en la vida de todos.

Por otro lado, las aplicaciones y juegos que utilizan implican en muchas ocasiones la interacción con desconocidos: y ya sabemos que en la red no todo el mundo es quien dice ser (hablaremos de cómo tratar este tema en el próximo blog).


Es por eso que la APP Family Link, de Google, de la que voy a hablaros hoy, nos facilita la vida en este sentido.

Esta APP, que se instala en los dispositivos de los padres y de los hijos, mantiene conectados ambos terminales de un modo respetuoso para el hijo mientras da a los padres cierto 'control' sobre el uso que los hijos hacen de los aparatos.

Una de las opciones más potentes que nos brinda esta APP, es la posibilidad de determinar el máximo de tiempo diario que se usa de cada aplicación instalada en el teléfono o bien determinar un máximo de tiempo de uso del teléfono en total. Así, y habiendo decidido esta cantidad por acuerdo mutuo, el niño se ve con la responsabilidad de aprender a gestionar su propio tiempo de pantalla. No hace falta entonces que los padres estemos encima del uso que hacen del teléfono, puesto que cuando el tiempo se agota, el terminal (o la aplicación en concreto que ha superado el tiempo máximo) se bloquea.

Por otro lado, cada vez que nuestros hijos salgan de casa, el sistema de rastreo de la app nos permite saber dónde están en cada momento. Esto nos brinda cierta tranquilidad sobretodo cuando empiezan a ir solos por la calle.

Además, cada vez que los hijos quieran descargar una nueva app, los padres pueden (o no) autorizar esta descarga, de manera que evitamos que utilicen aplicaciones que sabemos que no están preparados para utilizar o que creemos que no son adecuadas para su edad.



A parte de esto, tiene funcionalidades adicionales como:

  1. hacer sonar el teléfono de nuestro hijo aunque esté en silencio (Esto viene muy bien en caso de que lo haya 'perdido' en algún lugar de la casa).

  2. También, aunque no se debe hacer un uso indebido de esta opción, nos permite bloquear de manera instantánea el dispositivo de nuestro hijo.

  3. Compartir una cuenta de pago familiar para automatizar las compras o pagos en las apps (aunque siempre solicitará aprobación del adulto).

  4. la no-desactivacion de la APP en el dispositivo del hijo (por mucho que lo desee, no podrá desbloquearla).


Esta es una aplicación, como veis, que nos empodera a los padres con la educación del uso de las pantallas. Pero cuidado, es un arma de doble filo. No debe presentarse nunca como una herramienta de control ni de castigo, sino como un recurso para ayudarles a utilizar sus dispositivos de manera inteligente y para evitar un abuso y adicción. En todo momento les debemos hacer saber que se pueden llegar a acuerdos para modificar las condiciones, y debemos ser flexibles cuando necesiten utilizar las pantallas por alguna cosa en particular (por ejemplo, si están organizando una fiesta de cumpleaños, es lógico que ese día necesite más tiempo de chat).

Podemos realizar una dinámica de coaching familiar para presentar e incorporar esta herramienta en el funcionamiento del hogar, planificando entre todos, también, momentos de tiempo en familia o de actividades complementarias, dándoles alternativas a los hijos al tiempo que emplean en la pantalla.

Ante todo, recordemos siempre que los límites y el afecto van de la mano en la educación poderosa.

Si te ha gustado este artículo, dale un me gusta, comenta y compártelo con aquellos que les pueda interesar.

Para más información como está, síguenos en las redes de @academia.nanqurunaisa y en el blog de la web www.nanqurunaisa.es.

Un abrazo grande, salud y mucha paz.



bottom of page